MÓNICA CECILIA

COMENCÉ A IMAGINAR

 Yo, como escritora, soy psicóloga y tengo un gran gusto por los cuentos cortos. Al igual que a todos, las experiencias que vivimos en nuestros primeros años suelen acompañarnos durante toda la vida. Fue en los libros de lengua española en la escuela donde descubrí mi pasión por los cuentos cortos. Autores como Marta Brunet y Horacio Quiroga me mostraron una riqueza insospechada. Mis favoritos eran los relatos que retrataban costumbres locales y animales con características humanas, como "El loro pelado", "El ruiseñor y la rosa", "Platero y yo", "Sub terra", "El niño que enloqueció de amor", "Juan Salvador Gaviota" y los relatos de Kahlil Gibran, entre muchos otros, que acompañaron mi infancia y adolescencia. También me cautivaron las extraordinarias poesías y odas de los galardonados escritores chilenos Gabriela Mistral y Pablo Neruda. Más adelante, me impresionó la forma de escribir de los autores holandeses, quienes a menudo utilizan un estilo directo y cotidiano para comunicar. Con la idea fundamental de que no hay una única forma de expresarse, comencé a imaginar...

"La lectura es una de las actividades más beneficiosas para la salud, puesto que se ha demostrado que estimula la actividad cerebral y fortalece las conexiones neuronales”. Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN)

Escribir se origina en una necesidad de expresar lo que se siente.

El compromiso es ofrecer una selección diversa de cuentos cortos que aborden temas profundos y universales, explorando la complejidad de la mente humana y las emociones. Nuestros relatos están cuidadosamente diseñados para despertar la imaginación, generar conexión emocional y brindar una experiencia literaria única.

Cada persona se maravilla con la realidad de una forma diferente. Aspiramos a ser un recurso confiable para aquellos interesados en la intersección entre la psicología y la literatura.

Deseamos impactar positivamente la vida de nuestros lectores al ofrecerles historias emocionantes, profundas y significativas que despierten su imaginación, estimulen su pensamiento crítico y los inspiren a explorar nuevos horizontes en su desarrollo personal y emocional.

El motor que nos mueve

Son relatos que surgen entrelazados desde la curiosidad por el mundo interior de las personas, el funcionamiento cognitivo y la expresión en la conducta.

El EXTRAORDINARIO EQUIPO INSPIRACIONAL

Juntos sumanos, unidos multiplicamos

Luz Elena Caballero

En cuanto vi sus pinturas, de inmediato supe que ella debía ilustrar Amigo Pez.

Rogier Nelissen

Agrega valor incalculable a todos mis proyectos, aportando con estrategias, humildad e inspiración.

MI FILOSOFÍA

La mitad de mis ganancias del libro Amigo Pez se dona a la investigación genética

Por casi 4 años trabajé como miembro de la junta directiva de una asociación de pacientes holandesa. La asociación une a personas con el síndrome de Ehlers-Danlos. Este síndrome constituye una enfermedad que, por deformaciones en la fibra colágena, produce alteraciones y comorbilidades que limitan considerablemente la vida de las personas afectadas. 
Es una enfermedad genética, donde el tipo más común, el hipomóvil, no tiene origen genético conocido. Actualmente, investigadores de todo el mundo hacen esfuerzos por encontrar los genes implicados en la enfermedad. Esto permitirá entenderla de una mejor forma y ofrecer tratamientos más adecuados. La asociación global de pacientes, la EDS-Society https://www.ehlers-danlos.com/ entrega información completa sobre este síndrome y también recauda dinero para la investigación.

Las ganancias referentes al libro "El día en que la piedra venció al zorro", están destinadas a UNICEF Holanda.

Luz Elena Caballero 
Arte e ilustraciones 

Este proyecto me ha brindado la oportunidad de realizar uno de mis sueños: Traducir palabras en imágenes. 

Luz Elena Caballero, la ilustradora, es una artista de origen colombiano que se dedica apasionadamente a pintar cuadros.
Desde muy pequeña me ha gustado mucho dibujar, pintar y leer. Cuando lees, interpretas las palabras del autor y las conviertes en tus propias imágenes, te sumerges en un mundo diferente, y a menudo imaginario. Siendo niña, me nació el deseo de escribir un cuento. Yo quería escribir un cuento porque quería hacer los dibujos y plasmar en papel lo que estaba imaginando. Este deseo de expresión me impulsó años más tarde a estudiar arte. Para mí pintar significa hacer contacto con otro ser humano. Conectarse, aunque sea por un instante, invitándolos a mi propio mundo, a ver la realidad a través de mis ojos, y al mismo tiempo, ver mi realidad a través de sus ojos.